jueves, 27 de agosto de 2009

Anónimo

Cuando trabajas en Barcelona, no hay día que no te ocurra algo o que veas algo sorprendente...hoy me centraré en un chico, el cual siempre coje el mismo tren que yo, incluso el trasbordo hasta Sagrera.
El caso es que yo soy una chica de costumbres, siempre me pongo en el mismo vagón, y en el mismo lugar esperando a que llegue el metro ( q por cierto, el otro dia intenté entrar cuando sonaba ya el 'pipipi' y de poco me deja sin brazo, maldito metro, máquina de matar, me vengaré!) y en resumen, aquel chico siempre está en el andén de enfrente. Siempre está con su mp4 escuchando música, y con su mochila cruzada azul.Me pregunto qué escuchará, cómo se llamará y qué tipo de vida llevará.
En esas horas muertas de espera me imagino la vida de las personas que me llaman la atención y la de este chico en especial, teniendo en cuenta que quizá lo veo más que mis allegados...(al menos, entre semana).
Toda esta historia viene a que hay gente en esta vida que sin saber porqué le das una importancia porqué despierta algo dentro de ti, y este anónimo, ingorando totalmente esto, lo hizo en mi.
Nunca sabrás que escribí esto para ti, y no importa, está bien así. Nos vemos el próximo dia :)


1 comentario:

  1. ¡me encanta esta entrada! en esto nos parecemos muchísimo, somos un par de observadores y nos imaginamos cómo será la vida de esos desconocidos a los que vemos a diario en el mismo sitio... a mí mañana se me acaba la diversión, por eso...

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